Fachada de la Unidad 21 del Servicio Penitenciario Federal
La Cámara Federal de Casación Penal sobreseyó a un preso que tenía tres cigarrillos de marihuana para "su consumo estrictamente individual" al reconocer su uso medicinal "tendiente a aliviar los episodios de dolor que las enfermedades que padece" (HIV, tuberculosis y asma).
Se trata de un recluso que estaba "internado por prescripción en el Centro Penitenciario de Enfermedades Infecciosas Unidad 21" del barrio porteño de Barracas.
Fuentes judiciales indicaron que los camaristas Horacio Cattani y Martín Iruzun revocaron el fallo del juez federal Claudio Bonadio que había procesado al interno por "tenencia de estupefacientes" en una resolución que fue apelada por el defensor oficial Gustavo Kollmann.
Los magistrados de la Sala II se basaron en el fallo de la Corte Suprema que despenaliza la tenencia para consumo personal si no se afectan a terceros.
"Se advierte que no surge de las constancias del sumario labrado por los agentes penitenciarios intervinientes ni de los elementos de convicción arrimados con posterioridad circunstancia o extremo alguno del cual pueda derivarse razonablemente del comportamiento atribuido un peligro concreto o daño a derechos o bienes de terceros", dijeron los jueces.
En ese aspecto detallaron que "el material estupefaciente incautado -en concreto, tres cigarrillos de marihuana- fue hallado recién ante una requisa de rigor oculto dentro de las pertenencias del imputado (dos disimulados en su almohada y otro dentro de un alimento)" y "que ninguna noticia de su ingreso se tenía hasta el momento como que tampoco se verificó una actividad de consumo, menos aún en presencia de terceros".
"Estas circunstancias de tiempo, modo y lugar del secuestro son acordes con el descargo del imputado, en cuanto refirió que la sustancia se hallaba destinada a su consumo estrictamente individual, tendiente a aliviar los episodios de dolor que las enfermedades que padece le causan", ponderaron los camaristas.
Fuentes judiciales indicaron que los camaristas Horacio Cattani y Martín Iruzun revocaron el fallo del juez federal Claudio Bonadio que había procesado al interno por "tenencia de estupefacientes" en una resolución que fue apelada por el defensor oficial Gustavo Kollmann.
Los magistrados de la Sala II se basaron en el fallo de la Corte Suprema que despenaliza la tenencia para consumo personal si no se afectan a terceros.
"Se advierte que no surge de las constancias del sumario labrado por los agentes penitenciarios intervinientes ni de los elementos de convicción arrimados con posterioridad circunstancia o extremo alguno del cual pueda derivarse razonablemente del comportamiento atribuido un peligro concreto o daño a derechos o bienes de terceros", dijeron los jueces.
En ese aspecto detallaron que "el material estupefaciente incautado -en concreto, tres cigarrillos de marihuana- fue hallado recién ante una requisa de rigor oculto dentro de las pertenencias del imputado (dos disimulados en su almohada y otro dentro de un alimento)" y "que ninguna noticia de su ingreso se tenía hasta el momento como que tampoco se verificó una actividad de consumo, menos aún en presencia de terceros".
"Estas circunstancias de tiempo, modo y lugar del secuestro son acordes con el descargo del imputado, en cuanto refirió que la sustancia se hallaba destinada a su consumo estrictamente individual, tendiente a aliviar los episodios de dolor que las enfermedades que padece le causan", ponderaron los camaristas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario