20 de marzo de 2016

Investigan varias pistas que dejó el dinero de una organización narco

Las "mulas" llevaban cocaína en las suelas de sus zapatillas

Por Gabriel Di Nicola (La Nación)

Todo comenzó en junio pasado con la detención de cinco jóvenes de origen humilde que intentaron subir a un avión con destino a España con cuatro kilos de cocaína ocultos en las plantillas de las zapatillas. Detrás de las "mulas" había una poderosa organización. Después de identificar a los presuntos eslabones superiores, los investigadores van tras las pistas del dinero de la banda narcocriminal.

En las últimas horas, el juez en lo penal económico Marcelo Aguinsky ordenó el bloqueo de las cuentas bancarias de los imputados y de sus familiares. El magistrado también pidió a la Unidad de Información Financiera (UIF) un análisis de los movimientos económicos de uno de los presuntos organizadores y reclutadores de las "mulas", identificado como Ezequiel Pablo Cettu.

Así informaron a LA NACION calificadas fuentes judiciales. Ayer, Aguinsky procesó con prisión preventiva a Cettu, que había sido detenido la semana pasada y le trabó un embargo sobre sus bines hasta cubrir la suma de 1.500.000 de pesos.

El juez también ordenó la captura nacional e internacional de Diego Dodero, de 38 años. Está imputado de integrar una asociación ilícita, la misma calificación por la que procesó a Cettu. Dodero utiliza un documento falso.

Como informó LA NACION en su momento, la causa se inició en junio pasado cuando personal de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) descubrió a las "mulas" cuando abordaban un avión en el aeropuerto de Ezeiza rumbo a España. Se trata de un caso inédito por la cantidad de sospechosos descubiertos en un mismo vuelo.

En esa oportunidad, los cinco detenidos eran todos ciudadanos argentinos de entre 22 y 39 años e iban a viajar a España en el vuelo UX 042 de AirEuropa.

El caso comenzó cuando personal de la PSA controlaba a un pasajero que estaba por embarcar. Cuando revisaba su ropa, el joven se puso muy nervioso. "Los detectives de la PSA le solicitaron que se identificara y le formularon preguntas sobre su itinerario y el motivo del viaje, según el protocolo para estos casos. El pasajero respondió en forma contradictoria y eso constituyó un perfil de posible caso de contrabando", explicaron fuentes oficiales.

Control de la vestimenta

El mismo informante agregó: "En otro de los sectores habilitados para los controles, personal policial detectó a un pasajero sobre el cual se activó la alarma del dispositivo de detección; a continuación se le aplicó el procedimiento de control sobre sus ropas y de las preguntas de rigor. Del procedimiento resultó que el pasajero portaba unas plantillas moldeadas con cocaína".

Uno de los primeros pasajeros demorados con la droga fue a identificar a sus dos otros acompañantes, que ya estaban en el preembarque. "Se trasladó a todos los sospechosos a la guardia, donde se estableció comunicación con el juzgado de Aguinsky, desde donde autorizaron la requisa de las personas y sus demás pertenencias, lo que dio como resultado que los cinco pasajeros transportaban cocaína oculta en sus zapatillas y en su ropa interior. El total de droga secuestrada fue de 4,036 kilos", informaron fuentes con acceso al expediente.

La fiscal en lo penal económico María Gabriela Ruiz Morales y detectives de la PSA continuaron con la pesquisa para tratar de dar con los eslabones superiores hasta que sus sospechas dieron con Cettu y Dodero como presuntos organizadores de los viajes y reclutadores de las mulas, informaron fuentes judiciales.

"Se estima que la red de tráfico que operaba esta organización era de más de 20 «mulas». Las reclutaban entre gente joven de origen humilde. Eran preparados con precisas instrucciones para viajar con la droga y bien «lookeados» con diversos perfiles de viajeros para pasar desapercibidos en los distintos destinos", dijo a LA NACION una fuente judicial.

En las últimas horas, el juez Aguinsky dio intervención al Área de Cibercrimen de la Policía Metropolitana a fin de que trabaje en coordinación con la PSA para "el análisis de la información contenida en las computadoras secuestradas en los allanamientos hechos la semana pasada".

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